Mi Favorito

Published 01 noviembre 2005 by Ají Dulce | E-mail this post

"Fue entonces cuando se le ocurrió que su torpeza no era la primera victoria de la decrepitud y la oscuridad, sino una falla del tiempo. Pensaba que antes, cuando Dios no hacía con los meses y los años las mismas trampas que hacían los turcos al medir una yarda de percal, las cosas era diferentes.
Ahora no solo crecían los niños más de prisa, si no que hasta los sentimientos evolucionaban de otro modo. No bien Remedios, la bella, había subido al cielo en cuerpo y alma, y ya la desconsiderada de Fernanda andaba refunfuñando en los rincones porque se había llevado las sábanas. No bien se habían enfriado los cuerpos de los Aurelianos en sus tumbas, y ya Aureliano Segundo tenía otra vez la casa prendida, llena de borrachos que tocaban el acordeón y se ensopaban en champaña, como si no hubieran muerto cristianos sino perros, y como si aquella casa de locos que tantos dolores de cabeza y tantos animalitos de caramelo había costado, estuviera predestinada a convertirse en un basurero de perdición. Recordando estas cosas mientras alistaban el baúl de Jose Arcadio, Úrsula se preguntaba si no era preferible acostarse de una vez en la sepultura y que le echaran la tierra encima, y le preguntaba a Dios, sin miedo, si de verdad creía que la gente estaba hecha de fierro para soportar tantas penas y mortificaciones; y preguntando preguntando iba atizando su propia ofuscación, y sentía unos irreprimibles deseos de soltarse a despotricar como un forastero, y de permitirse por fin un instante de rebeldía, el instante tantas veces anhelado y tantas veces aplazado de meterse la resignación por el fundamento y cagarse de una vez en todo, y sacarse del corazón los infinitos montones de malas palabras que había tenido que atragantarse en todo un siglo de conformidad.

-¡Carajo! -gritó.

Amaranta, que empezaba a meter la ropa en el baúl, creyó que la había picado un alacrán.

-¡Dónde está! -preguntó alarmada.

-¿Qué?

-¡El animal! -aclaró Amaranta.

Úrsula se puso un dedo en el corazón.

-Aquí -dijo."

-Cien Años de Soledad

5 Responses to “Mi Favorito”

Dímelo on 4:42 p. m.

Cien Años de Soledad es mi segundo libro favorito. Cuando lo digo la gente suele preguntarme "ay no, si ese libro es un enredo". Y la verdad es que cuando lo leí por primera vez, por allá por bachillerato, tuve que hacer un esquema con los nombres de la gente y de quién eran hijos y de quién eran padres para no perderme entre tantos Aurelianos y tantos José Arcadios. Uno de mis personajes favoritos es Ursula, tan tenaz, tan fiel, la espina dorsal de la familia Buendía. Este que seleccionaste es un muy buen pasaje. Hay días en que a uno le pasan tantas vainas que no queda sino decir "Carajo!" para evitar decir algo peor ;-)
Ají Dulce on 2:30 p. m.

A mi me pasó lo mismo que a ti cuando lo leí por primera vez, y también me decían lo mismo del libro, empezando por mi mamá a quien le causo tan poca impresión que sólo se acordaba de mauricio babilonia. Este libro es mi favorito, me lo he leído 4 veces ya y cada vez que lo leo me gusta más.
Guayoyo on 5:10 p. m.

lo siento, pero ni leerè el post.. jajajajajja se te pegaron las malas mañas
Ají Dulce on 6:07 p. m.

Webs!!! Sabes que noooo!!!
TecBear on 7:34 p. m.

Excelente selección. Yo lo lei como cuatro veces. Se perdió de casa de mis padres y nunca me volví a comprar para mi. Saludos.